miércoles, agosto 09, 2006

Busco la calma

El mirador estaba desierto. Me aproximé a la barandilla y la ciudad apareció a mis pies. Barcelona a mis pies; a mi izquierda montaña, a mi derecha Montjuic y de frente el Mediterráneo. La ciudad se sumergía en un mar de luces; un mar resplandeciente que se ensanchaba hasta llegar al verdadero mar, donde el destello desaparecía y se tornaba fosco, sombrío. Sólo tenues ráfagas de algún barco pesquero. El tráfico apenas era visible. La tranquilidad se respira aquí arriba. Los árboles silban una melodía al compás del zumbido del viento. Las ramas de éstos se estremecen y parecen ronronear como un felino.
Me gusta subir aquí. Cuando no puedo dormir, cuando el día ha sido estresante, me gusta venir aquí. Desde lo alto de este peñasco, donde la ciudad está a tus pies, el susurro no es más que un sordo bramido de la brisa. El ruido no existe aquí arriba. Es placentero.
Mi compañía se basa en lo que aquí se percibe, mi compañero más fiel, el silencio. En una grata disciplina de deseos y rencores, de placeres de un mundo que ya ha dejado de serlo, de algo que no puede ser mi mundo. El estrés es la tilde de nuestras vidas, o mejor nuestro acento más abierto. Antaño fue la pobreza y el hambre, las guerras, los dictadores, el poder...; últimamente los efectos climatológicos... -¿y después?.
Me siento en mi peñasco y contemplo lo que admiro, disfruto de este silencio sordo y dejo que la brisa siga azotándome en el rostro. Observo la ciudad y dejo por un momento el día; me apiado de la Luna que en lo alto enaltece y contemplo el camino serpenteante que dibuja en el oscuro baño de agua. Y en mis sueños me asumo y doy un paso al frente y me adentro en el camino blanco que se tambalea suavemente por el viento que forma la ola. Lucho a contracorriente y me anego en mi pesar, donde busco la calma de un largo día.

8 comentarios:

Tapa-Amarilla dijo...

HOla Dani felicidades por tu publicacion, te deje una encomienda en mi blog... si no entiendes chequeate los otros links.

Saludos!!

Ross dijo...

Dani dame luz, estoy como bloqueada y no se hacer mi encomienda de la tanka, la tuya quedo super, ctame que tengo que hacer pleaseeeeeeeeeeee

Dani González dijo...

Mi querida Roswell Joselin, mi más sincera enhorabuena ante todo por ese bebé maravilloso. Hace 20 meses pasé por lo mismo y oh por DIos, como disfruté.
Lo comento en "EL EVENTO" que puedes leer en mi pequeño baúl.

En cuanto a lo del Tanka, ummm, no sé, leí, me inspiré y continué, no sé si esta bien o mal. Espero que nuestra querida Tapa-amarilla, me de su aprovación....

Saludos cordiales

Celeste dijo...

Sentí la brisa; conocí otro lugar. Espero volver.

Gracias por la visita a mi blog y el comentario. No hago más que escribir lo que no me deja dormir.

Saludos celestes...

Anónimo dijo...

Saludos, Daniel
Me gustó esa apacible declaración de verdadera paz. Describes momentos que casi todos hemos perdido, envueltos en el mundanal ruido de nuestras vidas. :)

Diana L. Caffaratti dijo...
Este comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.
Diana L. Caffaratti dijo...

Dilaca dijo...
He llegado a una remanso donde la calma señorea y me contagia.

Anónimo dijo...

Todos tenemos ese lugar en el que refugiarnos de lo triste que se nos hace la realidad a veces. Lo difícil es hallarlo, pero una vez se encuentra, en secreto te reconforta y ya no puedes dejar de acudir a él cuando lo necesitas.
Tú lo has hecho, Dani, lo has encontrado, disfrútalo.

Un saludo.